REFLEXIONES (Flexionar dos veces)

Hay un descerebrado que está dale que te pego metiéndose en mi blog con la sana intención de no aportar nada de nada, y que solamente pretende ser una “mosca cojonera” y una mala persona, además de un profundo mentiroso y, por cierto, un cobarde compulsivo, como todos los anónimos. Pero por desgracia esto es el juego de la supuesta democracia (con minúscula) española, que más que apoyar la libertad apoya el libertinaje.

Yo imagino que este pobre chico o chica, aunque en una mujer no me lo puedo creer porque están más equilibradas, no tiene faena gracias a ZP, su jefe.

Este impresentable mantiene el anonimato, como todos los anónimos cobardes por naturaleza que no se atreven a dar la cara por nada del mundo porque temen que descubramos a su jefe, que es quien los manipula. Por supuesto, me ha dicho gente entendida en estos menesteres, que este tipo de individuos suelen ser una sola persona o a lo sumo dos o tres. Yo propuse una forma de contactar conmigo de manera directa y esa fórmula es través de facebook.

Hoy, al mediodía, el mentecato anónimo ha dejado caer otra insensatez.

Anónimo dijo....
Don Vicente, usted se jugó los huevos en la SER a que lo de Dalport era verdad, luego rectifico y se jugo la cabeza: Así que tiene dos opciones a se corta los huevos o la cabeza, usted elige.

¡¡¡Que gracioso!!! ¡¡¡Que imaginativo!!! Ja, Ja, Ja, pues yo le diría a este graciosillo y de paso se lo transmito a los pocos que pueden pensar de igual manera, que si dije que lo de Dalport era cierto es porque era cierto y yo no me he equivocado, lo de Inversiones Dalport S.A. es pura verdad, existe, se ha comprobado y tiene firmados unos acuerdos con los vendedores de acciones y tengo entendido, que no confirmado, que hasta se ha pagado alguna cantidad a cuenta.

Lo que también es cierto es que muchos de los que se van a hacer ricos y que son muy amigos de los todopoderosos que todos tenemos en mente, se han encargado de triturar la llegada de esta empresa con métodos no muy limpios. Pero si Dios quiere —y estos señores no se arrugan porque ahora ya es un tema donde juega el poder— aún podremos ver muchas cosas.

Nadie se ha preguntado ¿quién pinchaba los teléfonos de los abogados y empresarios que intervenían en esta operación por parte de Dalport, claro? Para mí eso era cuestión de las “Meigas”. ¿Quién ha filtrado documentación confidencial de Dalport cuando eso lo tenemos solamente cuatro o cinco personas? Sigue siendo cosas de las Meigas que “haberlas haylas”. Así podríamos estar mucho tiempo reflexionando, pero como estos señores hacen lo que quieren, pues tranquilos porque les transmito la frase que siempre está en su boca: “calma amigo, el silencio es salud”.

Hoy sin ir más lejos le he dicho a Toni Hernández que la próxima semana iré a su emisora en exclusiva y contaré desde el principio como se llevó la operación a cabo.

Desde la firma de la compra de las acciones del día 4 de Julio, día en el que desconecte del asunto hasta el 22 de Agosto no he vuelto a contactar con nadie sobre esta operación, solamente el atentado que sufri en mi despreciable entrevista con el no menos despreciable director deportivo de la cadena ser, pero pueden leer si no lo han leido mi contestación en un aticulo mio de fecha 10 de Julio. Les animo a leerlo por favor.

Yo participo, como así lo he dicho siempre, como intermediario, con los consiguientes emolumentos por mis servicios y nada más, prueba es que nadie me ha visto nunca en estos dos meses pululando entre los compradores y vendedores de esta operación, ni tan siquiera en la presentación de D. Vicente Soriano, que solo estuvo rodeado de amigos y aliados.

Con todo esto quiero decir que no tengo nada de qué arrepentirme en mi participación de esta operación, que no tengo que explicar nada a nadie, entre otras cosa porque nadie se lo merece y que por supuesto haría lo mismo si la situación se repitiera, ojalá, pues es mi “Modus Vivendis” y además piensen los más intransigentes que gracias a Dalport, se han juntando todas la fuerza financieras, políticas e industriales de todo signo a favor de nuestro Valencia C.F. pese a que las formas y los modos no son los más apropiados y éticos. ¿Si o no?, “qui lo sá”.

Si no es por Dalport y conociendo a nuestra sociedad esto no hubiese sido posible.

Hasta otro día, amigos y un cordial saludo.

Vicente L. Rubio