COMO AFECTA LA CRISIS A NUESTROS JÓVENES
Albert Einstein dijo:
“No pretendamos que las cosas cambien, si siempre hacemos lo
mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a las personas y
países, porque la crisis trae progresos, la creatividad nace de la angustia
como el día de la noche oscura.
Es de la crisis que nacen la inventiva, los descubrimientos y las
grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a si mismo sin quedar
superado. Quien atribuye la crisis a sus fracasos y penurias, violenta su
propio talento y respeta más los problemas que las soluciones, la verdadera
crisis es la crisis de la incompetencia.
El inconveniente de las personas y los países es la pereza
para encontrar las salidas y soluciones. Sin la crisis no hay desafíos, sin
desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es
en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento
es caricia.
Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es
exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos nuestro talento y nuestras
habilidades para encontrar soluciones, acabemos de una sola vez con la única
crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla.”
Una parte de los jóvenes
sin proyecto de vida, están desorientados y pensando en emigrar como en los
sesenta, pero mejor formados que entonces, otra parte esta peor preparada y
esperando que pase algo, como dijo la impresentable Pajin, quizá la alineación de
los planetas.
La crisis, los
contratos basura, las prácticas y becas precarias, están impidiendo a los
jóvenes en España entrar de lleno en el mercado laboral, pero tampoco hacen
grandes esfuerzos para salir de esta situación, porque en una encuesta de Metros
copia señala que el 54% de los españoles de entre 18 y 34 años afirma que no
tiene proyectos por los que sentirse interesado.
Han pasado su infancia y adolescencia en un ambiente de bonanza económica. Sus padres les han dado todo lo que pedían. En España, la edad media en la que los hijos abandonan el domicilio familiar se sitúa en los 34 años, pero que aumenta cada año por la crisis y el paro, que han obligado a muchos jóvenes a volver a casa de sus padres.
El hogar en el que vive un joven que no trabaja y que no estudia es una olla a presión, especialmente si acaba de entrar en la mayoría de edad, porque aquellas normas que antes se cumplían en casa, ahora no hay manera de llevarlas a cabo.
El joven tiene 18 años y piensa que debe liberarse de esas ataduras, la casa paterna se convierte en una especie de hotel al que va a comer, dormir, a ver la televisión, conectarse a Internet y poco mas.
El Sondeo de Opinión y Situación de
Respecto a qué consideran importante en la vida, el sondeo indica que la familia, la salud y los amigos son los que creen más importantes, les siguen el trabajo y ganar dinero, mucho más abajo en el ranking se encuentran la sexualidad y los estudios, pero lo realmente triste para mi, claro, es que
Esta generación está compuesta por jóvenes inactivos que no sólo no trabajan, sino que no buscan empleo, por parados sin empleo anterior ya que nunca han trabajado y por los que no cursan estudios ni reglados ni no oficiales.
Vivimos el nacimiento de una generación sin ilusiones, cuyos componentes están perdidos, sin horizontes, algo raro para quienes deben llevar las riendas dentro de unos años. ¿Se imaginan que una ley obligara a abandonar la casa paterna a los 18 años? Un ministro italiano hizo esta propuesta al principio de 2010. El objetivo: acabar con el hecho de que los hijos siguieran viviendo en la casa paterna más allá de los 30 años.
La propuesta se
formuló tras conocerse una sentencia en la que obliga a un padre a continuar
pagando la pensión alimenticia de su hija que, a los 32 años, continúa
estudiando Filosofía, carrera que lleva 14 años cursando, pues bien para vergüenza
de los políticos, los compañeros de
Gobierno del ministro rechazaron la medida.
En Madrid, más del 80% de los jóvenes madrileños de
El informe indica que el 76% de estos jóvenes entiende la noche como aventura y afirma que lo que le gusta es no saber qué va a pasar. Defienden el descontrol en las horas de ocio, un 64% asegura que desfasar es divertido; el 56% ciento dice que la prudencia arruina la diversión. El estudio señala otras conductas de riesgo al alza: relaciones sexuales con pareja no habitual sin preservativo, consumo excesivo de alcohol, conducir el coche con altos niveles de alcohol, consumo de drogas, peleas…
Las actividades preferidas de los jóvenes madrileños son estar con los amigo y escuchar música o la radio. Internet, la televisión e ir a bares o discotecas son las aficiones de un 40%. Sólo uno de cada cuatro dedica parte del fin de semana a estar con la familia. Algo falla en la ecuación cuando una gran mayoría considera a la familia lo más importante en la vida, ¿Quizá porque piensa que es la única que nunca falla? ¿Qué siempre esta ahí?
Y ahora me gustaría
contaros una historia de amor fraternal, de dos personas enfrentadas por la
soberbia y el orgullo y en un acto de
belleza de alma y casi de cuento de hadas se llego a un final feliz, leerlo
porque merece la pena esta lección de generosidad sin limites, a mi me ha hecho
pensar que no somos de piedra y hay gente muy buena todavía.
«Así que todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto
es la ley y los profetas.»
Jesús
Repito una vez más que os deseo una feliz Navidad y un
venturoso año 2012, que acierte el Gobierno y que lo notemos los españoles en
el bolsillo, en la ética y en la moralidad.
AMEN