jueves, 28 de julio de 2011

DESOBEDIENCIA CIVIL

Juan Manuel de Prada nos decía en un artículo magistral, como casi todos los suyos, si en España podríamos acogernos a una DESOBEDIENCIA CIVIL, en vista de las leyes injustas que día a día nos está imponiendo este Gobierno radical y vengativo.

¿Habrá en España jueces capaces de acogerse a este derecho para no dejar de ser hombres, dispuestos a ser expulsados al lugar que el Gobierno ha provisto para los espíritus más libres, a la única casa en la que pueden permanecer con honor?

H. David Thoreau publicaba en 1849 su obra “Desobediencia civil”, formulando un concepto sobre el que más tarde teorizarían muy diversos filósofos del Derecho, hasta que Gandhi lo convirtiera en motor de una liberación nacional.

Una cita del citado opúsculo, (para los de la LOGSE: Obra científica o literaria de poca extensión). Sumamente elocuente e iluminadora: «Existen leyes injustas. ¿Debemos conformarnos con obedecerlas? ¿Nos esforzaremos en enmendarlas, acatándolas hasta que hayamos triunfado? ¿O debemos transgredirlas de inmediato?

Bajo un Gobierno como éste, los hombres en general piensan que deben esperar hasta convencer a la mayoría para modificarlas, piensan que, si resisten, el remedio sería peor que la enfermedad, pero es el Gobierno quien tiene la culpa de que el remedio sea peor que la enfermedad, si la injusticia forma parte de los problemas inherentes a la máquina de gobierno, dejémosla funcionar, quizá desaparezcan las asperezas y la máquina se desgastará.

Pero si la injusticia requiere de tu colaboración, convirtiéndote en agente de injusticia para otros, infringe la ley, que tu vida sirva de freno para detener la máquina, lo que debes hacer es tratar por todos los medios de no prestarte a fomentar el mal que condenas.

Bajo un Estado que encarcela injustamente, el lugar del hombre justo es también la cárcel, hoy el único lugar que el Gobierno ha provisto para sus espíritus más libres está en las prisiones, para encerrarlos y separarlos del Estado, tal y como ellos mismos ya se han separado de él por principio, es la única casa en la que se puede permanecer con honor».

El ejercicio de la desobediencia civil exige, ante todo, espíritu cívico. Al desobediente no puede moverlo un interés personal o corporativo, sino la convicción de que su comportamiento deparará un bien a la sociedad. Asimismo, el ejercicio de la desobediencia civil habrá de tener un valor de ejemplaridad pública, de tal modo que, al negarse a aplicar o cumplir una ley injusta, su decisión contribuya a convencer al resto de ciudadanos de la justicia de su pretensión.

Por supuesto, dicha desobediencia ha de ejercerse pacíficamente y en coherencia con los principios que inspiran el orden democrático, pues su propósito no es socavar sus cimientos, sino promover la reforma de aquellos aspectos de la legislación que lesionan el bien social.

Para Gandhi, la desobediencia civil no era tan sólo un deber moral, sino un derecho intrínseco del ciudadano, que no podía renunciar a él sin dejar de ser hombre, quienes la han predicado y practicado - y a los nombres ya citados de Thoreau y Gandhi podríamos añadir los de Tolstoi o Martin Luther King-, consideraban que el fundamento último de la desobediencia civil era la existencia de unos principios de Derecho natural, anteriores a la ley positiva, que son intuitivamente identificables por la conciencia.

La desobediencia civil no debe entenderse, pues, como un mero desacato a la autoridad, sino como una oposición concreta a la ley injusta promulgada por la autoridad. Una ley es injusta cuando no es congruente con los principios inspiradores del ordenamiento jurídico. Así, por ejemplo, si la Declaración Universal de los Derechos del Niño establece que, para todos aquellos asuntos que afecten a la infancia, se legislará en beneficio de ésta, una ley que prive a los niños de una filiación completa, determinada por la dualidad de sexos, se habrá de reputar injusta.

Por supuesto, el desobediente civil debe estar dispuesto a aceptar la pena que la autoridad le imponga por no aplicar esa ley injusta. ¿Habrá en España jueces capaces de acogerse a este derecho para no dejar de ser hombres, dispuestos a ser expulsados al lugar que el Gobierno ha provisto para los espíritus más libres, a la única casa en la que pueden permanecer con honor?

Un cordla saludo

9 comentarios:

  1. Va llegando la hora de replantearse muchas cosas. Y, tal vez, una de las más importantes, sea la desobediencia civil.

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  2. Esto solo tiene un arreglo y es la desobediencia civil, pero no al estilo del perro-salchicha, vago y mal oliente, aquí hay que hacer algo serio que tiene su nombre pero que hay que tener muchos cojones y eso en España se acabo con ese señor que hacia "tejas".
    Un cordial saludo

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  3. Uff, complicado, con al Union Europea, el euro, sí hay que concienciar a cuanta más gente mejor.
    Saludos blogueros

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  4. ¿Has visto José Antonio? ha sido Zapatero leer mi blog y se ha "acojonado" al de ver lo de la desobediencia civil.
    Son unos cobardicas.
    Un saludo muy cordial

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  5. La teoría está más o menos clara, lo que no llego a captar es cómo llevar esto a la práctica. Porque a mí (puede que porque sea de la LOGSE) no se me ocurre ninguna forma de desobediencia civil física y real sin que ésta implique alguna reacción negativa o positiva por parte de la sociedad.
    Lo que vengo a decir es que si la desobediencia civil no molesta ni afecta a nadie no sirve para nada.
    Yo difruto con las palabras, las adoro. Pero me gustaría saber de qué forma palpable un individuo puede ejercer la desobediencia civil sin ser tachado de maleante o perroflauta

    De todas formas tendremos mucho tiempo para discutir sobre desobediencia civil. Cuando gobierne Rajoy las manifestaciones se sucederán (es triste, pero para que la gente salga a la calle tiene que gobernar el PP)y las cargas policiales por parte de la autoridad también.

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  6. Querido amigo Alex, para mi lo veo muy difícil y tal como piensas tu, el llevarla a la practica esto de la desobediencia civil, la única manera es consiguiendo que el PP como mal menor saque mayoría absoluta, entonces si que podría aplicar medidas sin tener que pactar con la "canalla" de nacionalismos, el cáncer de España.
    Es de sentido común que los mercados reaccionen a favor de España nuevamente y venga la mejora.
    Si los perro flauta y demás mentirosos de los que toman las calles salen a la ídem, el pueblo no lo consentirá.
    Si el PP consigue cambiar las normas y la Constitución y los 3 poderes públicos se consigue que sean independientes los unos de los otros, se habrá conseguido que esta clase de chusma que ahora gobierna no lo vuelva hacer nunca más.
    Por otra parte no creo en el PP actual que son parecidos a los PSOE actual, así que veremos lo que se puede hacer.
    Yo personalmente y si me respetan los dineros, me largare de este Pais antes llamado España y que se pudra como Gracia. Lo siento
    Te ruego que a partir de mañana entres en este blog y a ti que eres joven te mostrare algunas falacias que se han cometido en Pais antes llamado España. Cre que merece la pena. Un abrazo y sin acritud

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  7. PPSOE, medidas, reformas... me suena a lo de siempre Vicente. Maquillar, descafeinar y tener a la sociedad cogida por los huevos sin apretar mucho para que se crean libres.
    Si desobediencia civil significa votar al PP para que obtenga mayoría absoluta y (esto no sé de cómo puedes pensar que legue a ocurrir) esperar que hagan reformas de gran calado para la sociedad, no cuenten conmigo.
    Y lo de que los mercados reaccionen ante la elección de Rajoy... jejeje
    Los mercados a lo que van a reaccionar es a la quiebra del dolar del próximo lunes por la noche, la verdadera crisis está por llegar Vicente. Podríamos decir que la burbuja inmobiliaria y la actual crisis es "el vermutet".
    Esto no me lo invento yo eh, es que todo apunta a que va a ser así, y no vamos a tener que esperar mucho para ver si es verdad o no.

    Más que las falacias que se han vertido en España en estos años, me preocupa más la falacia económica mundial.

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  8. Amigo, lo primero que te tengo que decir es que no tienes mucha idea de como funciona esto y lo segundo es que yo ya empiezo a creer que tampoco, pero desde luego con los inútiles que habían no haremos nada de de nada.
    No voy a discutir que es lo que se puede hacer, lo que esta claro es que los que ocupan la calle son unos indocumentados y están dirigido por la extrema izquierda y si no al tiempo, y a los que vais de buena fe os engañaran como siempre han hecho.
    Son 4 y el de la guitarra y si no veas las asambleas de los miércoles. Nada de nada y a esos no los va a seguir nadie.
    La gente mas joven y preparada se va marchando de España y no quiero decir lo que va a pasar, pero me recuerda mucho a un año fatídico de hace 75 años, no escarmentamos.
    Un saludo y a vivir que son dos días.

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  9. Estoy totalmente de acuerdo con lo que dice Juan Manuel de Prada; la Educación para la Ciudadanía la han impuesto para adoctrinarnos. Creo que es mejor desobedecer una ley injusta que colaborar y hacerte tú injusto.

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